La importancia de los hides en el desarrollo del turismo ornitológico y de naturaleza, la actualización de la normativa que regula su creación y mantenimiento y las necesidades y requisitos para su instalación fueron algunas de las cuestiones que se trataron durante la jornada celebrada ayer en Sariñena.
Los tipos de hides y sus requisitos y características (ubicación, orientación, accesibilidad, etc), su explotación económica, el código ético de sus usuarios y la normativa aplicable, fueron algunos de los puntos que se abordaron en el evento organizado por Birding Aragón en Monegros. Un hide no es solamente un escondite desde el que tomar fotografías y observar a las aves sino, en el caso de los fijos, se convierte en un pequeño ecosistema en el que podremos ver aves y descubrir cómo interactúan con otras especies pero, también, visualizar mariposas, anfibios, insectos e incluso mamíferos que se acercan hasta este lugar. Un espacio creado por y para la observación que, tal y como se puso de manifiesto en la jornada de ayer, es de gran relevancia para la divulgación de nuestra riqueza natural, acercar las aves a todos los públicos y difundir la importancia del respeto y cuidado de la biodiversidad de nuestro entorno.
Durante la jornada, la experiencia y consejos de Miguel Ángel García, de Casa Gerbe en Sobrarbe, ofrecieron a los asistentes la posibilidad de conocer —de primera mano— algunos de los puntos más importantes a la hora de crear un hide. Desde los permisos a solicitar, los requisitos técnicos (ubicación, orientación, aportaciones, materiales y mantenimiento) o los necesarios para hacer su explotación viable, fueron algunos de los puntos que abordó el responsable del «Hide Birding Sobrarbe» en su presentación. Asociado a su alojamiento rural y complementado con una ruta geológica, ornitológica y botánica, este hide lleva en funcionamiento desde 2016 para clientes del establecimiento y visitantes externos.
Ferrán Guardia, del alojamiento rural O’Chardinet, abordó un tema de vital importancia dentro de la observación y fotografía de aves, como es el código de «Buenas prácticas en Fotografía de Naturaleza”. En su intervención desglosó un decálogo de recomendaciones para los usuarios y gestores de un hide, orientadas principalmente a proteger el bienestar de las aves sobre el resto de consideraciones. Consejos sobre ubicación, necesidad de conocimientos en la biología y comportamiento de las especies, camuflaje o alimentación, fueron algunas de las cuestiones que puso de relevancia.
La jornada continuó con la intervención de Jorge López Mañes, de Birding Teruel, en una exposición que ofreció consejos y valoraciones sobre cómo obtener rendimiento económico de un hide fotográfico, extraídos de su propia experiencia. Desde la inversión a realizar, el coste de su mantenimiento y la posibilidad de incorporar nuevas oportunidades para los negocios, aprovechando la instalación del hide, hasta recomendaciones sobre la promoción y difusión.
La jornada finalizó con una interesante intervención de Mª José Tomás del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (INAGA), órgano ambiental especializado en la tramitación de expedientes del Gobierno de Aragón, que introdujo la normativa actual para la instalación de un hide y cómo solicitarlo. También habló sobre las recomendaciones, legislación y actuaciones que se valoran y cómo afecta su ubicación e influencia en el comportamiento de las aves a la hora de recibir autorización o, incluso, de mantenerla. La charla se enlazó con la mesa de trabajo y debate dedicada a analizar y valorar las mejoras del actual procedimiento para la incorporación o gestión de un hide; moderada por Mireia Cabrero, de APATOE, contó con la participación de Carles Santana, de la empresa Photo-Logistics; Miguel Ángel García, de Casa Gerbe; Mª José Tomás, representante del INAGA; Sofía Morcelle de SEO/BirdLife y Peter Rich, de Casa Sarasa.
Durante dicha mesa de trabajo se subrayó la importancia de los hides a la hora de potenciar un producto turístico ornitológico y su interés para responder a la demanda creciente de los usuarios. Cada vez más los visitantes demandan estos espacios, no sólo para la observación sino también para la captura de imágenes y los hides se revelan, asimismo, como una importante herramienta para la divulgación y la educación medioambiental siempre que, gestionados de manera responsable y por profesionales, aseguren la no afección en las aves; estos observatorios se revelan, a su vez, como un importante foco de actividad económica, de carácter circular en muchos casos.
Durante la mesa de trabajo, los asistentes a la jornada pudieron intercambiar opiniones, realizar consultas y se generó un interesante debate. Como ponían de manifiesto algunos de los participantes, los hides son vitales para el desarrollo del turismo ornitológico en nuestros territorios y son muchos los que se inician en la ornitología (fotógrafos, aficionados o público familiar) a partir de sesiones en estos observatorios. La necesidad de optimizar y adaptar la normativa actual, disponer de un mapa con los hides instalados en el territorio aragonés, la profesionalización como garantía de buenas prácticas y el respeto a la biodiversidad así como la importancia de los estudios científicos para estudiar la afección en las aves como criterio para su instalación, fueron algunas de las conclusiones que se extrajeron de una jornada que contó con amplia participación desde todos los sectores implicados.
El evento —organizado por Birding Aragón con la colaboración de CEDER Monegros y Ayuntamiento de Sariñena—concluyó con una visita al Centro de interpretación la Laguna de Sariñena.
BIRDING ARAGÓN ( www.birdingaragon.com ) es un proyecto de cooperación entre los grupos de acción local aragoneses, la Asociación de empresarios de Ecoturismo y Turismo ornitológico de Aragón (APATOE) y Turismo de Aragón, coordinado por el grupo ADRI JILOCA GALLOCANTA y con SEO BirdLife como asesor técnico. El objetivo que se persigue es promover la ornitología como recurso turístico sostenible y medioambiental en toda la comunidad. Aragón es una tierra afortunada, que se caracteriza por poseer una variada avifauna, en consonancia con la riqueza de hábitats de su territorio.